Hablemos acerca de la grafomotricidad en los niños
La Grafo-motricidad se
define como
la capacidad de escribir o de manipular determinados utensilios que dejen
huellas o trazos sobre un soporte.
Su finalidad es corregir y estimular las
funciones motoras
finas
de los niños para que tengan un dominio completo de los
movimientos y, de este modo, poder coordinar la destreza de las manos y de
la vista.
Factores que Intervienen
Factor Motor:
Se determina por
el nivel de maduración,
es decir, un niño no puede
empezar a escribir hasta que su cuerpo esté preparado.
El factor motor hace referencia a la capacidad de control neuromuscular (presión del instrumento, postura del cuerpo, independencia funcional del brazo y mano y coordinación óculo manual). Inicialmente, el niño (a) sólo controla el trazo desde el hombro, luego desde el codo, la muñeca y finalmente desde la pinza fina (manos y dedos).
El factor motor hace referencia a la capacidad de control neuromuscular (presión del instrumento, postura del cuerpo, independencia funcional del brazo y mano y coordinación óculo manual). Inicialmente, el niño (a) sólo controla el trazo desde el hombro, luego desde el codo, la muñeca y finalmente desde la pinza fina (manos y dedos).
Factor Perceptivo:
Hace referencia a la forma del trazo
(posición, orientación, tamaño
etc.). Es aquí donde el niño se llega a dar cuenta de las características de los trazos para
poder reproducirlos (Arriba – Abajo; Derecha – Izquierda; Alto – Bajo; Abierto
– Cerrado).
Factor representativo:
Hace referencia al significado del trazo. El niño comienza
a
darle un significado a su dibujo, pero este significado suele variar en el
mismo dibujo.
La evolución va desde el dibujo libre
(garabato) hasta el codificado (la escritura).
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